El Consejo de Ministros ha aprobado un Real Decreto que regula la producción y gestión de los residuos de construcción y demolición (RCD) con el fin de evitar la contaminación de suelos y acuíferos en vertederos incontrolados, así como la eliminación de estos residuos sin aprovechamiento de sus recursos valorizables. En España sólo se recicla un 5% de estos residuos y el 90% restante se deposita en vertederos, debido al coste menor que representa su depósito en vertedero. Este Decreto obliga a un pretratamiento antes del depósito en vertedero, incorpora la aplicación del principio de responsabilidad del productor a estos residuos, y establece una serie de obligaciones para productores y contratistas.Además, este Decreto, abarca los residuos procedentes de la construcción, rehabilitación, reparación, reforma o demolición, y obliga al productor titular de la licencia a elaborar en el proyecto de obra un estudio de gestión de estos residuos, que debe incluir una estimación de las cantidades generadas, medidas de prevención a adoptar, el destino previsto para los residuos que se produzcan, así como una valoración del coste previsto para su gestión.Otra de las medidas aprobadas en el último Consejo de Ministros es el Real Decreto de recogida y gestión ambiental de pilas y acumuladores, el cual incorpora la Directiva comunitaria de 2006 que prohíbe la comercialización de pilas y acumuladores que contengan determinadas sustancias peligrosas, y establece normas para el tratamiento, reciclado y eliminación de estos residuos. Uno de los elementos más importantes, es que los productores tienen que cubrir los costes de gestión (recogida, clasificación, traslado, tratamiento, reciclaje, etcétera.), incluyendo las campañas de información pública.Por primera vez se fijan unos índices mínimos de recogida de residuos de pilas y acumuladores portátiles: el 25% para 2011 y el 45% para 2015.
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